
¿Porqué te amo tanto vida mía? ¿Porqué se me acaban los días en lágrimas desde que te conocí? Amo tu cuello que me invita a cobijarme. Precioso mío, yo nací para amarte desde la madrugada aquella en que llegaste a mí. Tus ojos azules son diademas que me arrastran al umbral de los sueños; y ya no me conozco. Ya sólo soy una con tu luz. Tus labios se detienen en el tiempo para beber de mi boca todo mi dolor. Tus pasos se aproximan hacia mis noches, cauteloso protector. INGRID ZETTERBERG Dedicado a mi amado Camilo Sesto De mi poemario "Tu alma y la mía" Derechos reservados Safe Creative Cta. 1006080193112